Al norte de Mallorca, en Pollensa, en plena Sierra de Tramuntana declarada en el 2011 por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, se encuentra Son Grúa, una finca de 267 hectáreas con bosques de encinas y pinos, olivos, algarrobos, árboles frutales, huerto y ovejas. La reforma de la casa se ha realizado manteniendo el carácter propio de la construcción
Uno de los elementos característicos de Son Grúa es el magnífico jardín con una superficie de más de 12.000 m2 en el que los clientes encontrarán espacios tranquilos para la lectura y la relajación. Las noches en el jardín son extraordinarias pudiendo contemplar desde una maravillosa luna llena iluminando todo el valle a un cielo plagado de estrellas con luna nueva.
Las trece habitaciones se han reformado totalmente con materiales de calidad, decoradas con mobiliario clásico y moderno y pinturas de la escuela pollensina, creando espacios amplios y confortables en los que los clientes disfrutarán de preciosas vistas al jardín, a la piscina o a la montaña. El agroturismo cuenta con servicio de restauración de desayuno, comida y cena. Todo ello acompañado de un trato muy familiar y personalizado para que su estancia en el agroturismo sea muy agradable.
En Son Grúa los clientes encuentran un lugar de paz y tranquilidad, rincones especiales tanto interiores como exteriores. Dentro de las casas hay amplios salones, en el jardín hay numerosos caminos con bancos. La piscina está situada en un lugar muy espcial. A los más activos también les proponemos pequeñas excursiones dentro de la misma finca en las que serán los únicos senderistas.
El origen de la propiedad se remonta a la época árabe en la que era una alquería y actualmente todavía se pueden contemplar el acueducto y restos de canalizaciones que servían para regar las áreas de cultivo. Después de la conquista de Mallorca por los cristianos, la finca ha pasado por numerosos propietarios mallorquines y desde el siglo XIX ha pertenecido a la familia Villalonga.
SON GRÚA ES DIFERENTE
Son Grúa, otra forma de ver la vida en donde cada cliente es único y especial. Un lugar donde perderse para descansar y disfrutar del espacio, del silencio, de la tranquilidad, solos o en compañía.
DISFRUTAR Y DESCANSAR